Ser un escritor McOndo no implica tener que escribir mal o citar a cada momento un grupo de rock distinto. Sino qué, es renunciar a los fantasmas, es abandonar los fantasmas espirituales por los verdaderos fantastmas que todos tenemos. Es indagar en los cien o cincuenta o treinta o quince años de soledad que casi a todos los latinoamericanos nos toca vivir, aguantar y soportar.
Ser un escritor Mc-Ondo es preguntarse ¿Hasta cuándo todo lo que se escribe en América Latina será sobre pueblos rurales, folclor, lo ocurrido hace decenas o centenas de años; cómo puedo identificarme con un personaje que pase lo que pase puede morir y resucitar, con una abuela voladora, o con un sitio donde los tucanes hablan?...
Si es asi, yo lo soy.
22-12-2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario